Los osteópatas craneales creen que hay una importante relación entre la osteopatía y la odontología: los estados que afectan a la boca y los dientes pueden tener efectos directos sobre el resto del cuerpo.
La cara está compuesta de varios huesos diferentes. Algunos de estos huesos son muy delicados y están conectados entre sí de una forma muy compleja.
Todos los huesos de la cara, así como los del resto del cráneo, son libres de moverse detalladamente y lo hacen de forma rítmica. Los osteópatas craneales creen que este movimiento es importante para mantener el drenaje de los senos nasales y permitir el libre pasaje de aire a través de la nariz.
Los traumas que reciba la cara pueden restringir el movimiento normal y rítmico de los huesos, y pueden generar efectos en el resto del cuerpo. Una de la causas más comunes de trauma, lesiones o tensiones dentales son los tratamientos dentales.

CAUSAS DE ESTRÉS DENTAL COMUNES EN LA CARA:

Extracción de dientes
Las fuerzas que se usan para extraer dientes pueden transmitirse a través de las articulaciones de algunos de estos delicados huesos de la cara. Esto podría tirar, forzar e interrumpir su movimiento fisiológico.
Síntomas comunes: problemas en los senos (nariz), problemas en la audición, dolores de cabeza, migrañas, dolores de cuello o dolores lumbares (de espalda).
El dolor y sensibilidad inmediatos después de una extracción indicando que ese lado de la boca no será tan usado para masticar, puede crear una mordida dispareja con una resultante tensión en el resto de la cara, cabeza y cuello. Esta situación puede persistir si hay huecos entre los dientes, y particularmente si existe más de un hueco.

Dentaduras postizas o prótesis dental completa/superior
Las prótesis superiores fijas producen el efecto de sujetar a los huesos del maxilar superior juntos y de manera rígida, limitando severamente su movimiento natural.
Síntomas comunes: dolores de cabeza, congestiones nasales, problemas en la audición, esfuerzo ocular.
PREVENCIÓN:
Las prótesis y las dentaduras postizas deben quitarse por la noche, y así permitir que la cara se libere por algunas horas todos los días.
La pérdida de todos los dientes conlleva eventualmente a perder hueso de la cara. Es muy importante mantener la distancia correcta entre el maxilar superior y el inferior. Si la altura de los dientes no es la correcta esto puede causar desequilibrios en la acción de los músculos de la masticación y tensiones importantes en ambos maxilares y cara. Las dentaduras postizas deberían reemplazarse regularmente en la medida en que se vayan desgastando, y quizás tendrían que ser reconstruidas eventualmente debido a la gradual pérdida de hueso.

Ausencia de dientes posteriores
Ocasionalmente las personas no tienen sus dientes posteriores, y sólo conservan los incisivos del frente. Si no se utilizan dientes postizos, toda mordida y masticación se realiza con los dientes de adelante.
Esto produce una tensión muy importante en las estructuras de la cabeza y el cuello. En general dará lugar a una gran tensión en el cuello, causando dolores en esta zona y en la cabeza.

Aparatos/frenillos y trabajos ortodóncicos
Un tratamiento de ortodoncia tiene efectos dramáticos en el funcionamiento normal de la cara y puede tener repercusiones en todo el resto del cuerpo. Los huesos de la cara sufren presiones enormes cuando los dientes son movidos de su cavidad a la fuerza. Esto restringe e interrumpe el movimiento normal de los huesos faciales y puede causar tensiones también en cara y cuello. En ocasiones puede afectar la postura de la cabeza sobre el cuello, dando lugar a problemas en otras zonas del cuerpo de forma adaptativa.
Síntomas comunes: dolores de cabeza, chasquidos en la mandíbula, irritabilidad, pérdida de concentración, dolor de cuello, disminución de inmunidad y aumento de vulnerabilidad a las tensiones músculo-esqueléticas.
Cuando se quita la ortodoncia: Las tensiones no siempre se van y en general son palpables hasta varios años después en la adultez.
Es altamente recomendado recibir tratamiento osteopático ANTES de colocar los aparatos para reducir las tensiones reales en su mayor medida (que son las que en verdad producen la posición no deseada de los dientes o la mordida). DURANTE todo el tratamiento ortodóncico, recibir sesiones ocasionales para ayudar al cuerpo a acomodarse a las tensiones adicionales y a las nuevas posiciones dentales (particularmente luego de cada ajuste). DESPUÉS de que se quiten los aparatos, para chequear y ayudar con cualquier efecto resultante.
Hay varios estudios osteopáticos realizados sobre el tema en los que se comprueba que la mayoría de los casos de tratamientos de ortodoncia no asistidos con osteopatía derivan en escoliosis y otros problemas de columna, sobre todo cuando se aplican durante la pre-adolescencia o edades cercanas.

Puentes
Los puentes en general no causan problemas en la mecánica de la cara. La excepción son los puentes que se colocan uniendo los dos incisivos superiores centrales (las paletas). En esta situación se fijan ambos lados de la cara, es decir, los dos huesos maxilares superiores quedan juntos permanentemente, lo que les quita libertad para permitir el leve movimiento normal que debería expresarse en esta articulación.
Síntomas comunes: el estrés inducido por un puente medial va a acentuar cualquier área de debilidad en el cuerpo. Los síntomas pueden ser muy variados, dolores de cabeza, problemas de oídos, de vista, dolores de cuello y espalda, incluso dolores en rodillas y pies.

Chasquidos en la mandíbula
Dolores y ruidos en la articulación témporomandibular (ATM) son síntomas muy comunes. Hay varias causas, una de ellas puede ser tensiones en la cabeza, cara o dientes.

Bruxismo
Mucha gente suele rechinar los dientes o apretar su mandíbula cuando intentan concentrarse o bajo situaciones de estrés. En los niños puede observarse este rechinar por las noches, y esto podría ser el resultado de presiones en la cabeza o cara que se han retenido desde posibles compresiones en el nacimiento.
Síntomas comunes: tensión, dolor, sensibilidad e irritabilidad en los músculos de la cara, cabeza y cuello.

PRECONTACTOS
Es importante que podamos indicar y ser atendidos cuando algo nos duele o molesta, y por sobretodo trabajar en equipo con nuestro dentista para que después de cada sesión podamos chequear juntos si hay precontactos entre los dientes superiores e inferiores cuando se han realizado arreglos, implantes o coronas.
Debemos tomarnos nuestro tiempo para pararnos de la camilla, mover un poco la boca, pisar conscientemente y dar cuenta de si sentimos la mordida cómoda o no. De notar algún diente más alto/bajo o más ancho/pequeño debemos avisar al dentista para que arregle el precontacto o la falta de contacto tantas veces como sea necesario.

• La osteopatía craneal y la odontología: una conexión importante

Podría parecer luego de leer este artículo que cualquier tratamiento dental debería ser evitado, pero ese no es el caso en lo absoluto! Y de hecho los tratamientos dentales pueden ser realizados habilidosa y correctamente con muy poco estrés para la mecánica de la cara.
Sin embargo, es importante destacar la conexión entre las tensiones y síntomas que resultan de los mismos y los tipos de problemas que observan los osteópatas. Muy a menudo se encuentran tensiones muy llamativas y relevantes en la cara de los pacientes que terminan siendo la verdadera causa de los síntomas.
Si hay un problema dental consistente y que causa dolores y molestias constantes, es muy importante tratarlo con su dentista. Además, sonreír es una parte muy importante de nuestra salud!
A veces sólo se trata de encontrar al odontólogo adecuado que nos transmita comodidad y confianza, y que nos de tiempo y respiro para poder reacomodarnos o descansar cuando lo necesitemos durante una sesión.
La osteopatía craneal ofrece tratamientos muy delicados y cuidadosos que pueden ayudar muchísimo a liberar tensiones faciales o craneales, y a acompañar cualquier tratamiento dental que pueda generar estrés en la boca.
Con osteopatía fluido energética: si se respeta el proceso y los tiempos propios del cuerpo, pueden observarse cambios importantes en la dentadura y la mordida en la mayoría de los casos. Al abordar el problema subyacente (como tensiones en los huesos del cráneo, de la cara u otras estructuras intracraneales) se está accediendo a la verdadera causa que genera la mala mordida o dientes chuecos o desnivelados, y se podrán ir observando los cambios sutilmente en la medida en que las estructuras de la cabeza, la cara y el cuello se vayan reacomodando en su posición fisiológica.

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Información facilitada por la Organización de Osteopatía Craneal de Reuno Unido:
“Sutherland Society”
Fuente: http://www.cranial.org.uk/page5.html